Los nuevos escenarios de la economía mundial influyeron en el gobierno federal para definir estrategias y líneas de acción tendientes a mejorar el uso de los recursos. Dentro de estos nuevos derroteros, destaca la implementación de modelos de calidad, acreditaciones y certificaciones de competencias y procesos, frecuentes en el sector privado, pero que cuando se aplican en el sector público conducen a nuevas dinámicas, pero también a nuevos temores. La limitada visión de exigir resultados en el corto plazo y la manera indiscriminada de estandarizar mecanismos e instrumentos administrativos con el objetivo de garantizar eficiencia, eficacia y calidad provoca un cambio radical en las estructuras y los procesos de actuación, modificando las relaciones interpersonales y fragmentando identidades. Ello trastoca la cotidianidad de los profesionales del servicio médico en su adaptación al isomorfismo institucional. Cada uno muestra una identidad profesional con la cual interpreta, re interpreta y le da sentido a estas dinámicas de mejora continua, con valores sólidos. Vaya un reconocimiento a los profesionales del servicio médico que con su cohesión identitaria fortalecen la institución.