Las nuevas formas del entendimiento, han generado un espacio de intelección donde los enfoques de las ciencias de la complejidad constituyen formas, vías y métodos de reconfiguración del pensamiento científico y social, expresados en metodologías, epistemologías y filosofías surgidas de la experiencia cognoscente. De este modo, las nuevas formas del entendimiento, colocan en el centro de su investigación un criterio de unidad analítico. Esta unidad de análisis genera nuevas cartografías. Ejemplo de ello es el descubrimiento de ciertas propiedades universales que subyacen en la totalidad de las redes complejas, tanto naturales como artificiales. Estos acontecimientos no solo esbozan una nueva cartografía sino que permiten comprender la naturaleza de lo complejo y sus orígenes. El valor científico y filosófico de las nuevas formas del entendimiento, supone salir de una comprensión fragmentada que ha instalado una perspectiva estructural de los procesos y los fenómenos. De este modo, el valor científico y filosófico de las nuevas formas del entendimiento, está en la posibilidad de generar un modo de percepción, un modo de organización cognitiva, lingüístico y epistemológico.