La educación superior en Colombia asume el profundo reto de preparar a los jóvenes para incorporarse en un mercado laboral cada vez más competitivo y cambiante. En gran medida la calidad de vida, al igual que las posibilidades de ascenso social de la población, dependen de una educación terciaria pertinente en relación con las demandas de los diferentes sectores económicos. Una de las apuestas que ha tenido el país en las últimas décadas para ofrecer opciones flexibles y pertinentes, es contar con tres niveles de formación profesional que son: la educación técnica profesional, la tecnológica y la profesional universitaria. La educación técnica ha demostrado, a lo largo de diferentes estudios, ser una herramienta muy potente para el desarrollo social y económico de una nación, sin embargo, en Colombia se encuentra desprestigiada, asociada a los sectores marginales de la población y ha hecho parte de diferentes procesos de mercantilización de la educación superior. La presente investigación analizó el estado actual de la pertinencia de la educación técnica profesional en Bogotá respecto a las necesidades del sector empresarial.