El terrorismo constituye una de las amenazas más horrendas que se cierne sobre la Humanidad porque además de recaer sobre muchas vidas inocentes, tiene la capacidad potencial de poner en peligro la paz y la seguridad internacionales. El autor, luego de un breve análisis de los antecedentes históricos que ha tenido el Derecho Penal Internacional para prevenir y reprimir este tipo de atentados, sostiene que, por su carácter proteico y cambiante, no es posible definir con precisión al terrorismo y explicita cómo se ha recurrido a regular los distintos tipos de terrorismo más conocidos hasta la fecha, descartando la posibilidad de una definición genérica que incluyera a las distintas expresiones de esta actividad criminal. En atención a ello analiza lo acordado en los principales tratados internacionales para la prevención y represión del terrorismo y lo hecho en el ámbito de las Naciones Unidas, del sistema interamericano y de la unión europea en esta materia, efectuando consideraciones sobre las acciones que estima se deben tomar contra este flagelo.