Los humedales artificiales (HA) son sistemas no convencionales en los que, de forma controlada, se reproducen mecanismos de eliminación de contaminantes en aguas residuales, imitando la dinámica de los humedales naturales, contribuyendo a una gestión integrada y sostenible del recurso hídrico. Se generan procesos confiables y eficientes en un medio arquitectónicamente diseñado, amigables con el medio ambiente, económicamente viables, de mantenimiento relativamente sencillo y con alta eficiencia. Se basan en el concepto de ciclos biogeoquímicos, a partir de vegetación macrófita, biopelículas o biofilms y medio granular que actúan como filtro natural para remover contaminantes. En este tipo de eco-tecnologías los biofilms juegan un papel fundamental, teniendo una alta influencia en la eficiencia, eliminando una gran variedad de contaminantes. Su aplicación se proyecta a una gestión integrada y sostenible, aplicando tecnologías con menor consumo de energía, la reutilización de recursos (economía circular), atenuando problemáticas como el cambio climático, la emisión de GEI, la pérdida de la biodiversidad, la contaminación ambiental, y que puedan ser utilizados en nuestra sociedad.