El presente libro tiene como objetivo fundamental delimitar a la figura del sicario, desde el punto de vista social y desde su representación literaria. Como personaje aparece a menudo en la novela colombiana de las últimas décadas y a partir de su génesis se ha ido construyendo un gran corpus bibliográfico denominado “Sicaresca”. Como figura social ha sido objeto de análisis de distintas disciplinas que desde su propia perspectiva dan una opinión sobre la constante proliferación y anclaje de este personaje en el contexto colombiano; es ese actuar violento y sin escrúpulos lo que quizás más llama la atención de los investigadores, que ven en el sicario un producto de las políticas neoliberales y de la marginación a la que ha sido sometido por las clases gobernantes. En Colombia existe un aclamado interés mediático y literario por esta figura que ha sido vilipendiada y odiada, pero a la vez consentida por la literatura, el cine y la televisión, que han visto con la explotación del fenómeno y todo el entramado del narcotráfico un gran éxito de ventas tanto en dicho país como el exterior.