Desde hace algunas décadas, la población mundial viene escuchando los términos "cambio climático", "calentamiento global", "efecto invernadero" y otros. Asimismo se ha venido discutiendo de la sobrepoblación y cómo el planeta tierra dentro de unos cuantos años sobrepasará su máxima capacidad. Por simple observación se puede afirmar que a mayor población, mayor cantidad de basura orgánica e inorgánica desechada y cuyo proceso de descomposición puede tomar desde pocos meses hasta miles de millones de años y esto representa un problema ambiental crítico. Surge entonces la necesidad de convertir estos desechos en materia prima, aprovechando el ciclo de energía y convirtiéndola en energía limpia utilizable. Este documento describe una investigación encauzada específicamente a la obtención de etanol de forma casera, utilizando cáscaras de verduras dulces y que se emplean en una base diaria en la cocina de gran parte de países de América, Asia y Europa. El etanol es un recurso energético potencialmente sostenible, y el estudio de su obtención de diversas fuentes representa un reto científico importante.