En la actualidad la brecha por falta de habilidades técnicas, digitales y blandas que no ofrece la Educación Superior y las que requiere el mundo laboral, se ha convertido en un tema crítico que afecta la empleabilidad y la competitividad en el mercado laboral, que no les permite tener éxito en los entornos laborales cada vez más exigentes, esto debido a que la falta de habilidades blandas, como la gestión del tiempo, la empatía y la capacidad de liderazgo, representa una brecha importante que dificulta la inserción laboral y el desarrollo profesional, por los conocimientos que se requiere en el mundo laboral actual. En ese contexto, la educación superior debe crear nuevas carreras, previo análisis de las necesidades de empleabilidad de los sectores públicos, productivos y terciario; complementadas con habilidades y competencias, como: la comunicación, resiliencia, ética pública, trabajo en equipo.