La trata de personas es la esclavitud en el mundo globalizado del Siglo XXI. Sus modalidades de explotación la conectan con múltiples delitos pero primordialmente con la violación de los derechos fundamentales del hombre al representar el sometimiento por la fuerza de un ser humano por otro. La India es uno de los países más castigados. De allí la importancia otorgada a la asistencia y al trabajo conjunto entre instituciones internacionales y nacionales en base a políticas y medios legislativos que tiendan a prevenir la trata, enjuiciar a los delincuentes y proteger a las víctimas. El foco de atención debe ser dirigido hacia las tensiones sociales emergentes entre la cultura y las leyes en una sociedad de características socio-culturales tan particulares como las que perviven en el sub-continente asiático a fin de visibilizar modos de combate más efectivos contra el citado delito.