La prostitución ha existido desde antaño, sin embargo en pocos países ha sido reconocida y regulada como trabajo. En Argentina la doctrina se encuentra dividida, pero dado el ideario social de entender a la prostitución como una forma de vida inmoral, aún no se ha logrado su regulación como trabajo autónomo, lo que ha ocasionado la exclusión y discriminación de esta minoría, estigmatizada por su profesión. Este libro intentará reflejar la situación a que han quedado relegados los trabajadores sexuales, la opresión de la que son víctimas por las distintas normativas, pese a ser una actividad no prohibida y la vulneración que sufren en sus derechos. Se pretende, de esta manera, brindar herramientas que permitan lograr el dictado de una normativa que regule el trabajo sexual realizado por mayores, en forma autónoma, distinguiéndolo de la prostitución y de la trata de personas, para que esta minoría, hasta entonces olvidada, logre alcanzar la igualdad con el resto de los trabajadores y el reconocimiento a sus derechos.