Durante la última década, Chile ha debido hacer frente a la necesidad de adaptar y mejorar su normativa referente a la defensa de los derechos del consumidor como efecto del auge de las malas prácticas y abusos empresariales en un contexto de fuerte asimetría de poder respecto de una ciudadanía debilitada y fragmentada. En este contexto, este estudio busca explorar la percepción de los consumidores chilenos respecto del vacío existente entre la realización de sus derechos y los mecanismos institucionales que los garantizan.