Seguramente todos, tanto los devotos del futbol como los acérrimos críticos del mismo, nos hemos pasmado en alguna ocasión, más que por el juego en sí, por las acciones y las actitudes de los aficionados, los hinchas, los fanáticos (que no son necesariamente los mismos). ¿Cuáles son los motivos detrás de la violencia, en apariencia tan irracional que se suele desplegar en los estadios? ¿Qué mueve a una persona a ponerse la camiseta de un equipo y sentir que se le va parte de la vida si este pierde? ¿Cómo se construyen la relaciones de representación e identidad entre un equipo, sus aficionados y la ciudad en donde se encuentran? Sin pretender dar una respuesta definitiva a estas preguntas,con esta investigación, llevada a cabo para obtener el grado de Doctor en Ciencias Antropológicas por la UAM-Iztapalapa, trato de entender este complejo proceso social mediante el cual nos declaramos como parte de un equipo, aunque nunca pisemos el césped de la cancha. A partir de la coyuntura en que un equipo con poca afición llegó a una ciudad sin equipo de futbol, esta tesis trata de contestar la pregunta de ¿por qué van los aficionados al estadio? desde una perspectiva antropológica.