El conjunto de avances técnicos, en general, e informáticos en particular, ha puesto al alcance de los docentes y de los investigadores una serie de herramientas que hasta hace poco tiempo eran impensables. Un claro ejemplo es la edición digital: captura, grabación, manipulación, montaje y distribución de vídeos. Pero el alumnado –y la sociedad en general- desarrollan parte de su actividad en un entorno condicionado por el lenguaje audiovisual: televisión, cine, Internet, informática, videojuegos, etc. La idea central de este trabajo fue realizar una serie de documentales escolares e investigar los efectos educativos de estos materiales en diferentes situaciones de enseñanza. Así, el estudio del leguaje audiovisual nos incitó a planificar una propuesta didáctica basada en la gramática visual. Recordemos que la cámara hace mucho más que “poner un marco” alrededor de la situación real; más bien, genera relaciones (mensajes) que no están presentes en el contexto original. De este modo, pretendimos propiciar la alfaberización audiovisual a través de la lectura de imágenes (Peek, 1993) y el desarrollo de la capacidad visoespacial (Mathewson, 1999).