El objetivo de este estudio fue investigar los efectos antimicrobianos de diferentes aceites esenciales: albahaca, tomillo, orégano, menta y romero sobre algunas bacterias transmitidas por los alimentos. En la mayoría de los estudios, los antimicrobianos se utilizan en los alimentos por dos razones principales: para controlar los procesos naturales de deterioro (conservación de los alimentos), y para prevenir/controlar el crecimiento de microorganismos, incluidos los microorganismos patógenos (seguridad alimentaria). Con este fin, una posibilidad ha sido el uso de aceites esenciales y los compuestos que se encuentran en ellos como conservantes alimentarios antimicrobianos alternativos. En el futuro se investigarán las aplicaciones alimentarias de los antimicrobianos naturales, especialmente la eficacia de los aceites esenciales, individualmente y en combinación con otras partes del extracto vegetal, otros aceites esenciales eficaces y otras técnicas de elaboración de alimentos.La inteligencia artificial se utilizó para traducir este libro.