La presencia de una mediación natural, que antecede a toda mediación tecnológica con el entorno, implica la formación de sistemas propios para cada especie. Su comprensión permite establecer los universos de mediación natural, las barreras comunicativas entre las especies y las formas de mediación cultural, incluyendo la intermediación. La naturaleza física y operacional del medio, en tanto objeto complejo, se expresa en sus elementos constitutivos que pueden ser físicos, lógicos o híbridos; de los cuales, el elemento operacional por excelencia es el mensaje, en cuya significación radica su cualidad de ser tal. En este contexto, la impronta, que designa el aprendizaje en su fase crítica, vendría a ser el puente entre mediación natural y mediación cultural, siendo el punto de partida de esta última. El hecho que la cultura sea aprehendida y cultivada hace que la educación esté en el principio de toda mediación cultural, manteniéndose como nexo entre las facultades innatas y la representación del mundo. Con estas premisas, el ensayo hace un recorrido por las principales formas de mediación e intermediación, mostrando la diferencia en base a su operatividad simbólica.