El código de aguas chileno, considerado por muchos como el más liberal del mundo, ha generado polémica desde el año de su publicación (1981). Diversos artículos sobre gestión de recursos hídricos centran su crítica en que esta Ley produciría “acaparamiento” de Derechos de Aprovechamiento de Aguas, lo que impediría un adecuado funcionamiento del mercado y la reasignación óptima, que es precisamente lo que buscaba el modelo de gestión, plasmado jurídicamente en lo que se denomina Código de Aguas del año 1981. En el presente trabajo, se realiza un análisis sobre los efectos de la legislación chilena en materia de aguas en el país y en lo particular en la región de La Araucanía, al sur de Chile, así también el cobro de patente por NO uso introducido con la Ley 20.017 de 2005, desde el punto de vista de la teoría económica. Para ello, se describe en forma general el funcionamiento de una cuenca hidrográfica y su rigidez, se analiza la aplicación del modelo del especulador, se consideran además los resultados del cobro de patente por no uso al año 2018.