En 1867, el gobierno republicano de Benito Juárez derrotó al segundo imperio mexicano a la cabeza de Maximiliano de Habsburgo; este régimen monárquico derrotado fue fruto de la intervención francesa por impulso y determinación de Napoleón III. Con ello, se estableció definitivamente en el Estado mexicano el régimen republicano federal que prevalece hasta el presente. Frente a las posturas y proyectos políticos de régimen que iban de la república federal a la central o a la monarquía, Juan Nepomuceno Almonte tomó posturas de acuerdo a sus ideales e intereses. Se documentan esas posturas, algunas de las cuales permanecieron en todo su servicio público, y otras, se modificaron según el contexto. Se explica la trayectoria política de un hombre en el ejército, la representación popular, la representación diplomática y su contribución a la producción cultural en la historia de México del siglo XIX.