Con una visión heterogénea e impresionista el autor aborda un amplio abanico de temas en un intento por aproximarse al ensayo, la crónica, el análisis de textos... dotado de un refrescante lenguaje que luce animado por el alucinante universo de las metáforas. Al recorrer esos variados asuntos, autores y obras, el autor se ubica en la perspectiva de lector-macho (Julio Cortázar dixit), operando la lectura activa, transgenérica, recreando textos en un afán desprejuiciado y libertario que lo conduce desde las páginas del Quijote, pasando por las crónicas de indias, la pasión desbordada de Miguel Hernández hasta las más recientes obras de la filosofía cuántica.