Hace más de veinte años, en Europa, empezaron a surgir las primeras aproximaciones al fenómeno de financiamiento colectivo o crowdfunding. Este sistema de financiación en masa permite a un emprendedor llevar adelante un proyecto, con el aporte de capitales de personas desconocidas. Todos los meses, miles de emprendedores en todo el mundo atraen los recursos que necesitan para poner en marcha sus ideas. Una parte de los apoyos provienen de familiares y amigos, pero el grueso proviene de personas que en el acto de contribuir, hacen a priori, dos cosas contra natura: confiar en una persona desconocida y confiar en una idea que no está materializada aún. Este fenómeno de financiamiento emergente, no sólo involucra cambios en los modelos de negocios tradicionales, sino también modificaciones profundas en las pautas culturales de la sociedad. Nuestro país se ha sumado a la corriente del crowdfunding desde 2011. Las nuevas iniciativas que se están gestando y el creciente número de colaboradores, contribuyen a que este fenómeno tome cuerpo y encauce el interés social. A lo largo del libro, nos preguntamos ¿por qué el crowdfunding crece en nuestra región?