Individuos y sociedades son dos enunciados que utilizamos comúnmente, y parecería que hablar de ello es ocioso. Incluso diversos autores se han referido a ellos de distintas maneras; pero precisamente por ello, el hacer estas referencias hace que su comprensión no parezca tan simple. Es más está en el interés, tratar de demostrar que son dos enunciados demasiado complejos.La única forma de validación que se puede tener en el conocimiento del objeto social, es cuando el estudioso también forma parte de lo estudiado, pues aprende, comprende, acepta y corrobora lo que se dice y hace; es ahí donde la ciencia social puede encontrar el criterio que le permita establecer su concepto de ciencia, propio y distinto del que ahora se le atribuye, en el estudio de ese objeto complejamente inestable.