El carcinoma mamario es una de las patologías más frecuentes que se presenta en las mujeres, según la OMS se diagnostican 2,3 millones de nuevos casos anualmente, lo cual representa el 11,7% de todos los casos de cáncer en las mujeres.Como tratamiento complementario a la cirugía de mama tenemos la linfadenectomía que se ha planteado de forma clásica como una cirugía necesaria y radical en las pacientes con cáncer de mama y afectación axilar, ya que disminuye la recidiva tumoral y representa el mejor predictor de pronóstico en términos de supervivencia. El dilema es que la linfadenectomía axilar tiene una alta morbilidad por lo que es necesario discriminar aquellas pacientes que se benefician realmente de este procedimiento.En los últimos 20 años la estadificación ganglionar en el cáncer de mama se ha modificado con una cirugía accesoria, la introducción de la biopsia de ganglio centinela que actualmente es el procedimiento de elección, disminuyendo así la aplicación de la linfadenectomía axilar en pacientes sin afectación axilar, evitando la alta morbilidad que se asocia a este procedimiento, especialmente el linfedema.