Este estudio transversal examinó la etiología emergente de la violencia de género, conformado por tres componentes básicos: acción más producto más resultado. Fueron comparadas dos categorías de causas incoadas judicialmente procesadas. De 1.284 denuncias durante el año 2017 fueron resueltas el 88%. Se empleó test psicométrico de evaluación de Matrices progresivas de Raven a víctimas anónimas. Todas las víctimas presentaron alteraciones en el orden cognitivo. Representan significativamente factores históricos sobre criminalidad. Plurivalencia, tales como la violencia en los ámbitos educativos e intrafamiliar, fueron estadísticamente plausibles en sinapsis con la investigación. Los resultados prescriben roles con énfasis en baja escolaridad, conflictos interpersonales, vulnerabilidad psicológica, física real o aparente, dominio del agresor hacia la víctima, inciden directamente en la conducta del comisor.