Este libro nos da una mirada global de lo que sucedía con el arte en Chile a fines del siglo XIX y principios del XX. Es así que tomando como excusa a este monumento inaugurado en 1904, nos vamos adentrando en el pensar político de la época, en las aristas económicas que mediaban al arte, además de la carga ideológica que se transmitía a través de él. Gracias a la simple curiosidad, y a la afanosa investigación, es que fuimos encontrando una gran cantidad de fuentes primarias, que solas se interconectaban entre sí, dando forma al presente libro. Es llevados por esta lógica que llegamos al punto cúlmine de la investigación, el encontrar la razón ideológica, política, social y económica de ser de este monumento: el testamento del millonario empresario chileno, Agustín Edwards Ross, de 1897.