Es necesario la conservación de los suelos verdes que se encuentran como vecinos de las grandes ciudades, al ser estos los pulmones que ayudan a eliminar las emisiones que se generan por las actividades económicas cotidianas en las urbes, además en algunos casos también son las zonas que proporcionan alimento para sus habitantes. El instrumento económico planteado aprovecha el crecimiento en materia inmobiliaria habitacional y comercial derivado del desarrollo económico de la cuidad. Con los recursos captados por la aplicación del mecanismo, se tendrán los medios necesarios para evitar que los dueños de dichos terrenos se vean en la necesidad de vender o permitir la invasión a su predio y apoyarlos económicamente para conservar las actividades productivas actuales o modificarlas para proporcionar un mejor beneficio a la ciudad. No aprovechar el crecimiento derivado del auge económico de la ciudad será un suicidio, con la consecuencia probable de perder el suelo verde.