Se muestran, en esta obra, cuatro dimensiones que se constituyen en el proceso de Aprendizaje Dialógico (AD): Grupo, Diálogo, relaciones de poder/saber y utilidad del conocimiento. La unidad de AD es el grupo; la importancia va desde su conformación, la disposición para construirlo, el ambiente grupal, la conformación de una identidad compartida y la existencia de una tarea común que articula la grupalidad. El AD es generado a partir de la participación en un espacio que promueve el diálogo y lo coloca como motor de aprendizaje; además, indica su relevancia a partir de la utilidad que los aprendizajes puedan tener en la vida cotidiana de las personas en aprendizaje. Finalmente, las relaciones de saber/poder en la producción del AD se hacen presentes. Con este estudio se reconoce al proyecto socio-educativo como un espacio generativo de AD. Es así que se posiciona a la Psicología Comunitaria y a la Investigación Acción Participativa en la Educación; de igual forma, se fomenta la Interdisciplinariedad y se demuestra la actualidad de la Educación Popular.