La economía de un país no industrializado, como es el caso de Ecuador, depende fundamentalmente del desarrollo que alcance el sector comercial, puesto que es generador de empleo y recursos para el erario nacional. Si este sector se ve afectado por factores externos como es la devaluación de la moneda de los países vecinos, como ocurrió con el peso colombiano, ante la escalada del dólar norteamericano y la baja del precio del barril de petróleo, las expectativas de crecimiento económico se ven seriamente afectadas, especialmente en la región fronteriza que se sustenta en la comercialización de bienes y servicios antes que en la producción de los mismos. En tal virtud, el presente trabajo pretende analizar cómo influyó la devaluación de la moneda colombiana en la economía de la Ciudad de Nueva Loja, ubicada en territorio ecuatoriano y que tradicionalmente por ser una ciudad fronteriza depende del intercambio comercial entre los dos países.