Frente a los desafíos de la inclusión de estudiantes con necesidades educativas especiales (NEE), en las instituciones de educación regular, se plantea la incógnita de conocer, hasta qué medida las estrategias de gestión aplicadas, contribuyen a la efectividad de este proceso. Se seleccionaron instituciones educativas particulares, fiscales y fiscomisionales, con estudiantes con NEE. Se aplicaron encuestas, se diseñó una matriz de estándares e indicadores de inclusión, basada en el formato del Ministerio de Educación. En los resultados obtenidos se apreció una relación directa entre el cumplimiento de indicadores de gestión relacionados con la inclusión y el involucramiento de los miembros de la comunidad educativa, con la atención efectiva a los estudiantes con NEE; se concluye que independientemente del tipo de institución educativa, si no existe un convencimiento cognitivo, pragmático y afectivo de querer convertirse en una “escuela inclusiva”, este proceso queda en papeles, convirtiéndose simplemente en una “utopía”.