Cada vez cobra más auge en la sociedad contemporánea para el consumidor la publicidad subliminal y se extiende a propagandas, videos musicales, letras de canciones, películas infantiles y para adultos, siendo diariamente expuesta toda persona en los diferentes medios, que destacando claro está que afecta a personas con una débil estructuración yoica o de su personalidad, motivo por el cual inducen a expresiones automáticas e inconscientes por lo general de contenido erótico o agresivo, que en su mayoría motiva a expresión de pulsiones gobernando el proceder de personas de diferentes edades y estratos socioeconómicos. Claro no pasa inadvertido para cualquier persona pero ejerciendo una influencia variada acorde a su estructuración psíquica. Como si fuera “fondo y figura”, lo cual implica un serio trabajo científico. Los defensores de lo subliminal aseguran que ese “fondo”, constituido por estímulos subliminales, llega directamente al fondo de la conciencia, el preconsciente y suponen que por esa misma razón es capaz de motivar al individuo a un nivel preconsciente e inconsciente, de forma infalible.