Al observar las actuales causas de morbimoratalidad tanto a nivel mundial como nacional, se constata la persistencia de las enfermedades crónicas no transmisibles como las causales del mayor costo económico y social de los diferentes sistemas de salud. Este tipo de patologías tiene como característica fundamental la multifactoriedad para predisponer su aparición, y se estima que el 70% de estas enfermedades pueden ser de origen ambiental o comportamental, destacándose entre estos los hábitos de vida tales como la nutrición, el sedentarismo y el tabaquismo como los principales factores de riesgo, razón por la cual la actividad física emerge como uno de los elementos fundamentales que deben ser retomados en la sociedad actual, como espacio no solo para construcción de la riqueza motriz, (con todo lo que ella implica de equilibrio intelectual, psíquico y biológico) sino para el mejoramiento de la calidad de vida y como una de las estrategias exitosas a nivel individual para la promoción de la salud y prevención de la aparición de patologías o sus complicaciones en todos los niveles de atención.