La regeneración tisular sigue siendo un reto de la medicina contemporánea. Las cerámicas de fosfato cálcico (CFC) han sido ampliamente estudiadas como material de sustitución ósea siendo empleadas en procedimientos de reconstrucción del reborde alveolar asociadas a la colocación de implantes dentales y en el tratamiento de defectos periodontales. Los injertos autólogos son más eficientes desde el punto de vista osteogénico pero ciertas características de los biomateriales aloplásticos en cuanto a cantidad ilimitada de material, eliminación de una zona quirúrgica, disminución de la morbilidad del paciente y reducción del tiempo intraoperatorio pueden suponer una indicación en cirugía oral y odontología. Además, los materiales sintetizados en el laboratorio eliminan el peligro potencial de transmisión de enfermedades y/o reacciones inmunes y limitan el rechazo de los pacientes a ciertos materiales de origen humano y animal. Este libro expone como las CFC pueden ser alteradas y modificadas en su síntesis formando parte de la llamada ingeniería tisular.