Históricamente las aguas residuales provenientes de las industrias han tenido un impacto importante en los cuerpos de agua, la magnitud de este último y la determinación de los mecanismos necesarios para remediar el cuerpo de agua hacen que en la evaluación de un cuerpo de agua se integren todos aquellos factores que son determinantes para una adecuada interpretación de los resultados, de tal manera que permitan determinar el estado que guarda el cuerpo de agua receptor. Para la evaluación de un cuerpo de agua, así como el riesgo potencial que corre el ecosistema al ser impactado por sustancias químicas, es necesario considerar factores físicos, químicos, biológicos y toxicológicos. Los primeros y los segundos han sido agrupados en el índice de calidad del agua, los terceros en los llamados indicadores de biodiversidad, similitud e integridad, mientras que los cuartos relacionan los efectos que las sustancias tienen en la fisiología de los organismos y en la estabilidad del ecosistema. El análisis conjunto de estos factores conduce a mayor precisión en cuanto a la determinación del impacto y riesgo potencial.