A los cincuenta años de Vaticano II el tema del ecumenismo no pareciera inquietar de manera notable a la Iglesia católica romana en América Latina y el Caribe. Quizá pueda explicarse tal sensación si se considera lo acontecido en la misma asamblea conciliar y en las ulteriores de los obispos del continente. Examinar los itinerarios recorridos por la primera y las segundas contribuye al abordaje de la acogida y las renuencias al interior de los colectivos de obispos latinoamericanos. Y al planteamiento de unas posibles líneas que contribuyan a asumir la causa ecuménica en el derrotero propiciado por el Concilio del siglo XX.