Esta investigación reafirma la importancia del juego libre y espontaneo en el desarrollo del infante y, asimismo, contextualiza esta actividad en un escenario físico accesible por todos, es decir un espacio público recreativo que tenga como parámetro al niño. Para Tonucci (2003), al considerar las necesidades y deseos de los niños se tendrá en cuenta, también, las necesidades del anciano, del minusválido y de personas de otras comunidades. Es decir, aceptar la diversidad intrínseca del niño como garantía de todas las diversidades. En algo más relacionado al tema a investigar: Espacios públicos recreativos para niños en ladera en sectores de bajos recursos económicos, Takano y Tokeshi (2007) en su libro Espacio público en la ciudad popular: reflexiones y experiencias desde el Sur entiende el espacio público como aquel territorio de la ciudad donde cualquier persona tiene derecho a estar y circular libremente, que corresponda a espacios abiertos (calles, plazas parques, entre otros) como cerrados (mercados, bibliotecas, etc.)”.