Hasta febrero de 2024, la pandemia se ha cobrado la vida de más de cuatro millones. En México se acumulan casos confirmados de alrededor de un millón de víctimas. En este escenario, el Estado mexicano y las Instituciones de Educación Superior han escalado en un conflicto por la bioseguridad del regreso a clases. Mientras las políticas educativas giran en torno a la exposición a riesgos por el regreso a clases, aun cuando los jóvenes no cuentan con el esquema básico de inmunización, las universidades públicas apuestan por el desconfinamiento paulatino, el aprendizaje híbrido y el aula virtual. El objetivo de este trabajo es analizar y discutir las diferencias entre la administración pública de la educación y el institucionalismo de las universidades en torno al retorno al aula tradicional.