El objetivo central de este artículo se centra en contar o más bien develar sueños, anécdotas y miedos relacionados con la Matemática, con el convencimiento pleno que la mejor manera de aprender es, compartir lo que se sabe. Ya es hora de asomar la cabeza fuera del aula y narrar las maravillas, grandezas y miserias de la profesión de docente, porque de eso se trata: compartir, revelar un saber que si sigue encerrado, se volverá inútil