La gestión de políticas públicas y sociales es un complejo proceso multidimensional de aplicación de la ciencia, la tecnología y la innovación, donde concurren disímiles variables que no siempre pueden ser controladas en los planes y proyectos ejecutados. Ello determina el grado de eficiencia con que se deben valorar los diferentes momentos en la gestión del ciclo de las políticas para evitar los errores de improvisación o voluntarismo y los resultados e impactos indeseados que incrementan las vulnerabilidades y exclusiones. Como nunca antes el mundo necesita de una gestión eficiente y humana que supere la depredación y los egoísmos de cualquier signo a partir de enfoques postconvencionales sustentados en la ética del ser y no solo del tener como ha ocurrido por más de dos milenios. Todo proceso humano que aspire a resultados sostenibles y ascendentes conlleva una meticulosa labor de gestión de los recursos humanos, materiales, financieros, tecnológicos, comunicacionales y emocionales, que de forma integrada y sinergética permita alcanzar los objetivos propuestos con el menor costo social y a la vez el mayor índice de eficiencia, eficacia y efectividad en su despliegue creador.