La historia nos enseña que los individuos, reunidos colectivamente en sociedades, han tenido un tiempo de existencia que corresponde a las condiciones de su entorno, y todas esas colectividades han dispuesto de los medios que se encuentran en su ambiente para obtener los bienes de subsistencia y satisfacción. Dicho de otra manera, toda sociedad, en todo tiempo, ha adquirido, producido y reproducido los elementos de la naturaleza para tener los insumos que la mantienen con vida (alimentos y líquidos) y cuando éstos son excesivos para el individuo que se encuentra en su entorno, los distribuye, mediante un costo, para el consumo de los demás. Desde luego, también se adquieren y producen otros insumos de la naturaleza transformada para la satisfacción de otras necesidades históricas, como la vestimenta y la habitación. Si estimulamos un tanto nuestra imaginación, podemos pensar que a lo largo de la existencia humana hay algunas actividades que le han mantenerse como especie, y éstas son las que llamamos económicas. Si bien siempre han existido actividades económicas, no siempre se tiene un conocimiento cabal de las mismas, es decir, se da el hecho económico. Tercera edición.