El crecimiento económico, los avances tecnológicos y toda la gama de factores que conforman el entorno de las organizaciones modernas han ocasionado que las mismas, para mantenerse en el tiempo tengan que adaptar cada uno de sus componentes a estos cambios que inevitablemente van surgiendo. La forma de competir está surgiendo y aún cuando; cada factor productivo debe trabajar de manera eficaz en el logro de los objetivos planteados, cada vez se basa más en el conocimiento, lo que obliga a las empresas a crear nuevas ideas de forma más rápida que las demás. Estas transformaciones que paulatinamente se van presenciando está motivando que el Capital Humano este siendo reconocido como el activo más importante de la empresa, ya que está compuesto de conocimientos prácticos, habilidades adquiridas y capacidades aprendidas que influyen en la productividad; por lo que se debe hacer un esfuerzo por definir cómo adquirirlo, representarlo, retenerlo y administrarlo.