La filosofía de Descartes es una filosofía que indaga la verdad de las cosas, pero también está atenta a la acción práctica, a la vida misma. Ambos propósitos confluyen en sus escritos con objeto de dar una orientación cierta a la conducta de los individuos. Aprender a ver claro en los juicios para caminar con pie firme es la máxima que vertebra su teoría moral. Este libro reivindica la reflexión antropológica y moral en el proyecto científico cartesiano. Descartes recupera la vida afectiva en un sentido amplio y positivo: —las pasiones y los deseos procuran la perfección y el equilibrio integral de la persona que tiene alma y cuerpo a la vez. También analiza el papel de la razón en el gobierno de la vida. Razón y experiencia se conjugan para ofrecer una filosofía que es, ante todo sabiduría, o arte de vivir. A la luz de este enfoque más vital de su filosofía se invita al lector a adentrarse al pensamiento del filósofo francés, para quien la filosofía debía ser un quehacer práctico y no meramente especulativo. Las ciencias deben estar puestas al servicio de los hombres para aliviar sus necesidades materiales, pero también para desarrollar su calidad de seres morales.