Ante la idea de la moda como algo banal y superficial, aquí se propone analizarla como un fenómeno polifacético de gran incidencia social cuyo abordaje implica una reflexión a nivel del contexto sociocultural. La moda es de naturaleza narrativa: nos cuenta, al tiempo que lo expresado nos habla también de ella como fenómeno. Si bien este fenómeno tiene dimensiones masivas, nos afecta a nivel de las relaciones interpersonales, así como a nivel social y contextual. Esto se debe a que la moda se asocia a un movimiento de crítica respecto a aquellos valores que ya no se encuentran vigentes, y al mismo tiempo, se muestra como aliada de aquellos valores que disputan por establecerse. En cualquiera de los dos casos, se vincula a la expresión individual y social de aquellos elementos que manifiestan la señal de crisis con respecto a los valores universales. Es así como la moda, en tanto fenómeno social, se presente como constructora de procesos de subjetivación y subjetividad que se intentarán abordar en “Moda sin Sujeto” a partir de dos problemáticas: la construcción de la sexualidad femenina y el consumo del tabaco.