La política migratoria de México ha registrado cambios importantes en los últimos años. Desde una nueva Ley de Migración hasta la creación de nuevos programas con orientación humanitaria, junto con una vocación renovada en la protección a los derechos humanos de los migrantes. Como país de origen, tránsito, destino y retorno de migración, México ha debido conjuntar una política migratoria que le permita gestionar los flujos diversos de personas que confluyen en su territorio a inicios del siglo XXI. En este libro se analizan aspectos y programas de gobierno que indican la construcción de una política de puertas hospitalarias, la cual supera la vieja disyuntiva entre una política de puertas cerradas o una de puertas totalmente abiertas, para proponer un sistema de puertas abiertas a los visitantes de buena fe, pero con capacidad para detectar y prevenir las incursiones potencialmente riesgosas para la seguridad pública, fronteriza o nacional.