Este documento surge ante la necesidad de describir la culpa desde otro escenario, más libre y llevadero, como una realidad que emerge y acompaña al ser humano en los aprendizajes de su constante trasformación. Describe diferentes disciplinas que han indagado en las vicisitudes de la culpa y con ellas las realidades de dos culturas: Tribu Oromo (África oriente) y mexicana, siendo referentes y recurso para acompañarse en la misma culpa; a veces siendo una atadura o propiciadora del crecimiento personal; mediante historias narradas en las diferentes etapas de la vida, mismas como posibles generadoras y trasformadoras de la personalidad, comportamientos y formas de vivirse frente a un mundo que fue dado. Por tanto “El rostro desafiante de la culpa” es un aliciente propiciador de una propia conceptualización de la culpa, invitando a vivirla compartida, es decir, como un modo de vivirse arrojado al mundo y en el drama de la existencia misma.