Este libro es una tentativa de impulsar el encuentro entre ciencia y arte, en este caso del Trabajo Social con la Investigación basada en la práctica teatral. En segundo lugar es el resultado de un proceso que vengo realizando como activista del trabajo social y artivista del teatro social desde hace años. Unido a los puntos anteriores este libro es la defensa de una metodología enraizada en la intervención en lo social como espacio de encuentro desde los aprendizajes, espacio de intercambio entre los conocimientos. Una metodología humanista que usa el teatro como parábola para mostrar cómo el escenario social y el escenario teatral son las dos caras de un mismo espejo ante el que reflejarnos como seres humanos. En ese espejo, se encuentran los diferentes ángulos donde también es posible reflejar la condición de nuestros cometidos como investigadores sociales, de nuestras acciones como profesionales. Donde mirarnos como trabajadoras sociales en cuanto espacio crítico de una humanidad diversa y multicolor. Humanidad que aún se debate ante la fatalidad de una de una existencia contra sí misma, frente al drama de la la opresión o la dominación en en sus diferentes formas