En la actualidad con frecuencia se observa como, las principales formas de tratamientos de enfermedades son las sustancias químicas provenientes de la síntesis química y la modificación biotecnológica. Debido a que estas tecnologías no tienen la capacidad de cubrir por entero las necesidades de los individuos, en estos momentos en el ámbito mundial se vienen desarrollando nuevas tendencias en el uso de sustancias medicamentosas. Una de esas tendencias es recobrar el potencial que tienen los productos naturales, principalmente los provenientes de las plantas, para la cura y tratamiento de diversas patologías y cuyo uso había sido desplazado por las tecnologías mencionadas, aprovechando de esta forma, la gran gamma de especies existentes en todo el mundo. Teniendo en cuenta esta idea, es fácil apreciar que Colombia es un país privilegiado en biodiversidad floral, pues posee en su territorio una gran cantidad de selva y bosque tropical, donde abunda un sinnúmero de especies con posibilidades terapéuticas. Y además, como una propuesta alternativa y rentable de sustitución de cultivos