La cuenca del Reventazón es considerada como la de más alta precipitación registrada en todo el país, la voluminosa descarga hídrica permite el aprovechamiento para la producción hidroeléctrica y comportamiento torrencial, favorece los problemas de sedimentación en los embalses, así como amenazas para las poblaciones cercanas, situación que se magnifica con los conflictos de uso del suelo y las malas prácticas agrícolas.Actualmente en esta cuenca se encuentran operando tres plantas hidroeléctricas (Cachí, La Joya y Angostura), y en fase de construcción se encuentra el PH Reventazón. El P.H. Reventazón, por su ubicación geográfica, almacenará los sedimentos cuando se realicen las maniobras de desembalse de Cachí y Angostura, por lo que será necesario desarrollar un sistema de limpieza diferente a las que usualmente se utilizan en las plantas.La metodología propuesta para el sistema de limpieza del PH está acompañada de un protocolo para el manejo y control de los sedimentos en la F.O de la planta, la cual establece una serie de procedimientos que incorporan variables sociales, físicas y biológicas, para poder mitigar los impactos causados por la evacuación de sedimentos.