¿Por qué es relevante el pensamiento de Hannah Arendt hoy? ¿Siguen vigentes sus categorías de análisis para comprender la ‘postmodernidad líquida’ del siglo XXI? Después de más de 20 años leyendo y releyendo los ensayos de esta insigne autora, sostengo que, ciertamente, la obra de esta filósofa judeo-alemana se ha convertido en un punto de referencia imprescindible para comprender los hechos humanos y las experiencias políticas de nuestro tiempo. La riqueza de su abordaje teórico propicia, siempre, una reflexión crítica y abierta de los sucesos más relevantes ocurridos durante su vida y la nuestra, y también nos estimula a meditar acuciosamente sobre otras interpretaciones, de otros autores, sobre estos acontecimientos, para “iluminar” al mundo, en “tiempos de obscuridad”. Los tópicos examinados en los cuatro capítulos de este libro (“Premisas hermenéuticas”; “Las condiciones fácticas de la libertad política”; “Las condiciones de validez del poder comunicativo” y “Entre republicanismo cívico y democracia radical”) recogen, en buena medida, mi propuesta de respuesta a las interrogantes señaladas al principio.