La formación del estudiante de Medicina ha sido objeto de ocupación a lo largo de la historia. El modelo de formación debe estar en consonancia con las exigencias planteadas por el contexto histórico, que exige un profesional capaz de resolver las contradicciones de la práctica médica. La presente investigación centra el estudio en la formación del modo de actuación profesional médico. Esto es a partir de la necesidad creciente de que el proceso formativo transcurra en una relación coherente teoría–práctica, papel clave en la ampliación del espacio común que comparten los profesores y especialistas médicos, con los estudiantes y la población. Los principales resultados teóricos se concretan en una metodología que aporta niveles de formación del modo de actuación profesional médico, así como dimensiones, indicadores y subindicadores que posibilitan evaluar los cambios operados. El aspecto interventivo de la metodología se centra en tres etapas relacionadas entre sí, para concretar dichos niveles. La investigación contiene la operacionalización de la variable investigativa, las principales transformaciones reveladas en el experimento, y los resultados de la consulta a especialistas.