La presente investigación empieza a gestarse durante los años 2009 y 2010, espacio de tiempo en que me desempeñaba como arquitecto del Departamento de SECPLAC en la Municipalidad de Licantén, localizada en la Región del Maule. Durante este período de tiempo tuve la oportunidad de conocer las dinámicas sociales, económicas y urbanas del diario vivir en las localidades de Duao, Iloca y La Pesca; siendo estas caletas pesqueras y turísticas pertenecientes a la comuna antes mencionada el primer atisbo de planificación urbana externalizada (durante el proceso de reconstrucción post 27-F) con la que debí convivir en mi carrera profesional. En este contexto, tuve la oportunidad de experimentar in situ el terremoto y posterior tsunami del día 27 de febrero del año 2010, el que afectó a los 14 kms. de borde costero de la Comuna de Licantén, viéndose fuertemente dañadas, transformando radicalmente su fisonomía urbana y desencadenando luego importantes fenómenos sociales a consecuencia del proceso de reconstrucción que a partir de ese momento empieza a desarrollarse y que aún hoy se mantiene activo.