La hemodiálisis como terapia de sustitución renal, y procedimiento invasivo, incrementa el riesgo en todo momento de complicaciones que pueden ocurrir en la persona que se somete a este tipo de tratamiento, sin embargo, se agrega la alta demanda de requisitos de autocuidado de desviación de la salud que surgen por el proceso de salud-enfermedad, los que necesitan ser valorados por el profesional de enfermería en cada acto de cuidado que se tenga en la unidad de hemodiálisis. Por ello es importante que bajo el referente teórico de Orem, orientemos la búsqueda de demandas de autocuidado terapéutico porque permitirían valorar si el paciente tiene más necesidades de autocuidado que demandas de autocuidado, esto potencializaría que en cada estancia en la unidad de hemodiálisis, el profesional de enfermería optimizara el fomento de conductas generadoras de salud derivadas de una valoración personalizada. La capacidad de agencia de autocuidado a este respecto, permitiría indagar sobre las posibilidades y éxito en la ejecución de un plan de cuidado individualizado.