Las Tecnologías de la Información y la Comunicación –TIC- y las redes sociales para la comunicación y el aprendizaje se constituyen en los principales recursos del educador social, para atender necesidades de grupos en situación de riesgo. En el caso de los adultos mayores (AM), estas pueden ser comunicación y compañía. Para comprenderlos, se estudia el envejecimiento activo como un: “proceso de optimización de las oportunidades de salud, participación y seguridad con el fin de mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen.” (OMS, 2002; p. 79). Si los AM se sienten en buenas condiciones físicas y psicológicas, se tiene a un individuo motivado al que le afecta el encontrarse solo en el hogar, quedando expuesto a sufrir de soledad, una especie de abandono no intencional por parte de sus seres cercanos. En tal sentido, se plantea como interrogante: ¿Qué puede hacer el educador social para contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de los Adultos Mayores? y como objetivo: Fundamentar la utilidad de las TIC y las redes sociales, como recursos socio-educativos que contribuyan al mejoramiento de la calidad de vida de los Adultos Mayores.